Paris : Hacía falta un Bataclan
EL MOSSAD PREGUNTA A HOLLANDE PARA CUÁNDO LE VIENE BIEN OTRO ATENTADO
El espectacular repunte en la popularidad del presidente Hollande tras la masacre de Charlie Hebdo (su índice estaba en el 17% y ascendió hasta el 45%), no fue suficiente para que el equipo formado por Valls y Fabius pudieran reencarnar el “espíritu del 11-S”, que supuso la implantación en EEUU de la llamada “Acta Patriótica”. Hacía falta un ¡Bataclan¡…
Merced a esa añagaza jurídica, por la que la ciudadanía quedaba a merced de los caprichos de las fuerzas de seguridad del estado, se cumplía el sueño de la Administración neonazi que encabezaba el terrorista y genocida George W. Bush; un miserable que aún no ha sido procesado por los cientos de miles de crímenes cometidos en Irak, donde personas, tan humanas y respetables como las 129 caídas en el los atentados del 13-N en París, fueron masacradas por bombas, balas, venenos diversos, cuchillos, granadas y explosiones indiscriminadas perpetradas por kamikazes “armados” con cinturones de artefactos letales.
François Hollande es el mejor imitador de este delincuente tejano. El Gran Gilipollas del Eliseo (Le Grand Connard) delira y aspira a pasar a la historia como el Bush europeo, para lo que cuenta nuevamente con el espionaje israelí, al que Laurent Fabius y el no menos sionista de origen catalán Manuel Valls, sirven con lealtad y fervor.
Para completar el siniestro cuadro acude a posar una Angela Merkel encantada de servir a su vecino galo, mientras la prensa neofranquista (desde El País a la Vanguardia, del Correo al Sur, de Levante al Faro de Vigo) unen sus patéticas editoriales señalando como traidor al gobierno pepero, por no “echar una rápida mano a la pobre Francia en su conflicto de Mali”. Oh, la la…
El gobierno más criminal de la nación donde en 1789 nacía la Revolución, ha decidido iniciar la destrucción de todos los derechos del Hombre (la Mujer) y del Ciudadano/as, aceptando la estrategia belicista estaodunidense, violadora de la Carta de Naciones Unidas y de todas las normas que rigen aquel organismo internacional.
Hollande sabe que Washington asumió la fundación de Al Qaeda, el ISIS y otras muchas mafias del Terror islámico, sostenidas económica y militarmente por las dictaduras de Arabia Saudita y Qatar, ambas rendidas al estado de Israel desde hace décadas.
Es por ello de un ridículo pasmoso que los medios aún se dediquen a tratar de encoger el corazón de los pueblos, escribiendo panfletos tan cómicos como impresentables sobre “la unidad ante el terrorismo”.
La casi la totalidad de los partidos políticos españoles firmarán ese aberrante y estùpido pacto contra el ISIS, mientras PPSOE y demás morralla electoral se unen contra Rusia, única nación que cumpliendo la legalidad internacional ha derrotado parcialmente al monstruo creado por Wall Street e Israel.
No cometo ninguna locura al afirmar, taxativamente, que el Mossad permanece en contacto con París, preguntado a los esbirros de Hollande si el Grand Connard necesita algo más espectacular que unos atentados que tan sólo dejaron 129 muertos.
Desde hace décadas, caen diariamente 40, 25, 35, 60 víctimas en las más diversas ciudades de Irak, Afganistán y Siria, a manos de los mercenarios estadounidenses, rebeldes pagados por la OTAN, el ISIS y sus cómplices.
No he visto un sólo diario español que encabece su primera página con el lema “Somos Kabul”, “Somos Bagdad”… Los muertos no son europeos.
En el atentado de Atocha, en Madrid, aquel 11 de Marzo de 2004, murieron casi 200 personas. Nadie en Francia y menos en EEUU o Alemania, se colgaron lacitos con la leyenda “Ich Bin Madrid”, “Je Suis Madrid” o “I am Madrid”.
Y por ello les digo a los directivos de RTVE a El Mundo, de la Secta a El País: Meteros vuestra hipocresía y vuestros panfletos anti-Daesh, por el mismísimo trasero, porque vosotros formaís parte de la Gran Mafia de un terrorismo mediático tan criminal como el de aquel ISIS.
Cebrián lo tiene claro: Da gusto cuando los atentados ayudan a vender mucho más papel… aunque esté manchado de sangre inocente.
Fuente : Tena Carlos