La portada de ayer 22 de diciembre del diario “Gara” no pudo ser más estúpidamente manipuladora.
La intención era clara:“Oye, hostias, joer, tenemos suerte pues. Podemos es mejor que Amaiur, y que Sortu y que Bildu”.
La enorme pérdida de votos que ha sufrido Bildu, quiere ser recompensada por el periódico sucesor del añorado “Egin”, anunciando con alarde tipográfico y foto de Pablito en considerables dimensiones, que “Podemos impulsa el derecho a decidir en el debate del estado”.
Un titular que deja entrever a los pueblos del territorio borbónico, la convicción del director del medio (mediocre monago de Santiago Alba) de que el líder mediático es responsable, ante la historia, de la defensa del soberanismo a escala nacional.
No cabe mayor hediondez periodística y más clara manipulación emocional de unas declaraciones realizadas por un personaje que utilizó la popularidad adquirida en la televisión, para confesar que “Yo no quiero que Cataluña se vaya de España“, y poner la guinda de la envenenada tarta subrayando “…pero defiendo su derecho a decidirlo en las urnas”.
El independentismo camina hoy, gracias a esta clase de sibilinas declaraciones, por la senda del fracaso más rotundo. Los sondeos son claros y el algodón social no engaña.
En el hit parade de los temas que más preocupan a catalanes y vascos, la soberanía (llámenla autodeterminación) figura muy por debajo del paro, la sanidad, los desahucios y la corrupción.
Artur Mas, ya tan cómico como la portada de “Gara”, ha ofrecido a Iglesias un lugar entre los que caminan Juntos por el Sí, cuando desde la dirección del PPSOE ya se hizo público el rechazo a quienes pretenden cambiar la Constitución para legalizar el referéndum. Una vez más, lo prohíbe el bipartidismo.
Y el responsable del diario deposita toda su confianza en las trampas electorales de un trilero político como Iglesias.
Miles de ciudadanos/as de aquellas naciones, Euskadi y Catalunya, optaron en las últimas elecciones generales por derribar a Bildu y colocar en su lugar a las marcas de Podemos, en detrimento de aquellos que aún luchan por decidir su futuro, pero alejados del neofranquismo que padecemos desde hace décadas.
Y en ese apoyo, los otrora entusiastas de la independencia se lanzan a respaldar al que no le gustaría que se fueran de esta España cañí, de pandereta y charanga, con su Rey y con su OTAN.
Y “Gara” subliminal y torticero clama a las bases: “No os vayáis, que Pablito os traerá el soberanismo”. No cabe un titular más lamentable y falso.
Pero lo más penoso es que, en el hipotético caso de celebrarse ambas consultas, hoy por hoy, el NO ganaría al SÍ en ambas comunidades.
Y eso es, precisamente, lo que anhelan PPSOE, Ciudadanos, el Club de Pablito… y tal vez algunos submarinistas en el propio “Gara”.